+Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo según San Mateo
Mt. 16, 13-19
Al llegar a la región de Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos: "¿Qué dice la gente sobre el Hijo del hombre? ¿Quién dicen que es?" Ellos le respondieron: "Unos dicen que es Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, Jeremías o alguno de los profetas". "Y ustedes, les preguntó, ¿quién dicen que soy?" Tomando la palabra Simón Pedro respondió: "Tú eres el Mesías, el Hijo de dios vivo".
Y Jesús le dijo: "Feliz de tí, Simón, hijo de Jonás, porque esto no te lo ha revelado ni la carne ni la sangre, sino mi Padre que está en el cielo. Y Yo te digo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder de la muerte no prevalecerá contra ella. Yo te daré las llaves del Reino de los Cielos. Todo lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo".
_______________________________
¿Puede Cristo reconocer a quien no lo reconoce?. No. En otra parte leemos "Al que me reconozca abiertamente ante los hombres..." (Mt. 10, 32-33). Hoy es la memoria de un santo Papa, San León Magno, que fue llamado así por su compromiso con la urbe (se le reconoce haber frenado las tropas destructoras de Atila, el rey bárbaro) entre muchas otras cosas. Este Papa tenía un especial interés por la unidad de los cristianos, a tal punto que escribió en corrección de las ideas contrarias a la verdad que en su tiempo eran una preocupación para la Iglesia (arrianismo, maniqueísmo, etc.). No se sabe mucho de su vida, pero se conoce que nació en Toscana, una provincia italiana. El 29 de septiembre de 440 (calendario gregoriano) fue consagrado Sumo Pontífice y se sabe que mucho antes aún cuando era diácono de Roma fue muy capaz en cuestiones diplomáticas y políticas. Su paralelismo con otros Papas actuales es difícil de delinear, pero se puede decir que fue un Obispo comprometido con la Iglesia toda; escribió innumerables cartas a diferentes obispos y personas con cierto poder civil y tuvo un importante papel en el conflicto que dio origen el monofisismo del monje Eutiques (que sostenía la sóla naturaleza divina de Cristo, negando así que fuera humano). León I fue un santo escritor, sus sermones son elocuentes bajo las alas del Señor.
Este día también quiero recordar que tenemos Papa, y pido A San León Magno su intercesión ante el Trono de Dios por nuestro querido Papa Francisco. León fue un hombre de incansable celo por las cosas de Dios, reconociendolo delante de los hombres en toda ocación, aún cuando tuvo su famosa disputa con el obispo francés San Hilario (el de Arlés). Y sobre esto quiero detener una reflexión en la mente: El hecho que un Papa deba entrar en conflicto con otro obispo, o con cualquiera de los que le fueron encomendados por Cristo con las palabras "confirma a tus hermanos" habla de la condición de siervo de los siervos de Dios que tiene el Romano Pontífice, debe servir a todos en el sentido amplio del concepto; aún los que están errados y enceguecidos, por más pastores que sean deberán ser adoctrinados con sana doctrina emanada de la corona del Príncipe de los Apóstoles. La autoridad es dada por Cristo, nadie se corona a sí mismo en la casa del Señor. Hoy el Papa sufre algo similar a ese episodio, sólo que con más gravedad, ya que no está siendo confrontado por otro santo, sino por la curia romana, precisamente por los que se oponen a las reformas sanas y necesarias que necesitan allí. Al final entenderan los romanos que el Papa tiene razón, pero mientras tanto oremos para que al Vicario de Cristo no le falten las fuerzas ni le amarguen el corazón. Si, que permanezca haciendo la Voluntad de Dios con un corazón de León.