sábado, 14 de abril de 2012

Sábado "In Albis"

De toda la semana de Pascua el día de hoy es el más interesante. Llámese sábado "in albis deponendis", porque en él eran despojados, antiguamente, los neófitos de las vestiduras blancas con que habían sido adornados en el bautismo del Sábado Santo, para que pudieran mezclarse en adelante con la comunidad cristiana. La misa se celebra en San Juan de Letrán, a donde también acudían por la tarde los neófitos con sus padrinos, para esta solemne deposición de los trajes bautismales. Antes de despojarse de ellos, el Papa les dirigía una conmovedora plática, exhortándoles a la guarda de la inocencia. Finalmente se les entregaba un "Agnus Dei", reliquia que ya había sido distribuída por el Papa a los Cardenales, dignatarios eclesiásticos y fieles en general, en la misa de la mañana. 
                                                              Misal Diario para América en latín y castellano. Andrés Azcárate O.S.B. Abad del Monasterio de San Benito de Buenos Aires. Ed. Guadalupe 20 de noviembre de 1953.


Hoy también concluye la novena a Jesús Misericordioso, la que el mismo Señor enseñó a Santa Faustina Kowalska y le pidió que esta devoción se propagara en toda la Iglesia para que todos los hombres se confíen en la infinita Misericordia Divina.
"Los sacerdotes la recomendarán como última tabla de salvación". Jesús dio su promesa a Santa Faustina y a todos los que recen la Coronilla de la Divina Misericordia que se hace como sigue:
Se reza con un rosario común, se empieza con la señal de la Cruz y se reza un Padrenuestro, un AveMaría y el Credo; después siguen las cinco decenas. Al comienzo de cada decena se reza: PADRE ETERNO, YO TE OFREZCO EL CUERPO Y LA SANGRE, EL ALMA Y LA DIVINIDAD DE TU MUY AMADO HIJO Y SEÑOR NUESTRO JESUCRISTO, EN EXPIACIÓN DE NUESTROS PECADOS Y LOS DEL MUNDO ENTERO. Luego, en cada una de las diez cuentas se reza: POR SU DOLOROSA PASIÓN, TEN MISERICORDIA DE NOSOTROS Y DEL MUNDO ENTERO. Al terminar toda la coronilla se reza tres veces: SANTO DIOS, SANTO FUERTE, SANTO INMORTAL, TEN PIEDAD DE NOSOTROS Y DEL MUNDO ENTERO. La novena son nueve días en que se reza la coronilla cada día y con un propósito general distinto: Se comienza a rezar el Viernes Santo. Jesús dijo a Sor Faustina: "Cada día traerás a mi corazón a un grupo diferente de almas y la sumergirás en este mar de mi Misericordia"
1er día: Hoy tráeme a toda la humanidad y especialmente a los pecadores...
2: Hoy tráeme a las almas de los sacerdotes y religiosos.
3: Hoy tráeme a todas las almas devotas y fieles.
4: Hoy tráeme a aquellos que no creen en Dios y a aquellos que todavía no me conocen.
5: Hoy tráeme a las almas de los hermanos separados.
6: Hoy tráeme a las almas mansas y humildes y las almas de los niños pequeños.
7: Hoy tráeme a las almas que veneran y glorifican mi Misericordia de modo especial.
8: Hoy tráeme a las almas que están detenidas en el purgatorio.
9: Hoy tráeme a las almas tibias.
En una visión Santa Faustina vio a Jesús vestido de una túnica blanca, una mano levantada para bendecir, mientras la otra tocaba la túnica a la altura del pecho, desde el cual salían dos grandes rayos de luz, uno rojo y otro blanco. Jesús le dijo: "Pinta una imagen según el modelo que ves, con la inscripción: JESÚS, EN VOS CONFÍO. Deseo que esta imagen sea venerada en el mundo entero. Los dos rayos significan la sangre y el agua. El rayo blanco simboliza el agua que justifica a las almas; el rayo rojo simboliza la sangre que es la vida de las almas. Ambos rayos brotaron de las entrañas más profundas de mi Misericordia cuando mi Corazón agonizante fue abierto en la Cruz por una lanza. Bienaventurado quien viva a la sombra de ellos, porque no le alcanzará la justa mano de Dios".
He encontrado el Diario de la Divina Misericordia en formato digital en una prestigiosa biblioteca virtual "Documenta Catholica Omnia" pero está en italiano, al que pueda leerlo acá va el link: http://documentacatholicaomnia.eu/04z/z_1905-1938__Kowalska._Faustina__Diario_Della_Divina_Misericordia__IT.pdf.html

MAÑANA ES LA FIESTA DE LA DIVINA MISERICORDIA, SIEMPRE ES EL PRIMER DOMINGO DESPUÉS DEL DOMINGO DE PASCUA DE RESURRECCIÓN.
EL 30 DE ABRIL DEL AÑO 2000, DÍA DE LA CANONIZACIÓN DE SANTA FAUSTINA EL QUE LA CANONIZÓ, BEATO JUAN PABLO II, PAPA, DESPUÉS DE SU HOMILÍA ANUNCIÓ: "En todo el mundo, el segundo Domingo de Pascua recibirá el nombre de Domingo de la Divina Misericordia. Una invitación perenne para el mundo cristiano a afrontar, con confianza en la benevolencia divina, las dificultades y las pruebas que esperan al genero humano en los años venideros".

jueves, 12 de abril de 2012

Es Pascua en la Iglesia Santa

Estamos en la octava de Pascua del año de Dios 2012. Este tiempo es como si nos hubiéramos detenido en el tiempo, como si aún estuviéramos en Domingo de Pascua de Resurrección. Y es que la magnitud de la celebración tan importante del cristianismo es tal que necesitamos ocho días como un día para festejar el Misterio mayor de fe de los hijos de Dios. somos hijos adoptivos de Dios por Cristo, que murió en una cruz martirizado ferozmente por el hombre y después de tres días Resucitó de entre los muertos y abrió las puertas del cielo "rompiendo las cadenas de la muerte", como reza el Te Deum. Esta octava de Pascua es un paso a una vida nueva, en honor a Aquel que nos redimió aún sin merecerlo, porque nos amó hasta el final, y nos ama eternamente. La conversión llama a la puerta, a la puerta de nuestros corazones en estos días. Son tiempos en que debemos "ampliar los espacios del corazón" y abrirnos al amor divino del que procede toda gracia. Contemplemos al Cordero sin mancha, a Cristo, Nuestro Señor, y hagamos de nuestro espíritu una alabanza sin final a él, que tanto nos ama. Meditemos un instante la Pasión, y el relato de la resurrección en los Evangelios, encontrémonos con la Palabra Eterna y encontremos en nosotros un reflejo de Dios, un niño amado, una criatura privilegiada por el Creador. Meditemos un instante, instante que en la meditación ignora el tiempo, porque para nuestro Dios una vida de alabanza es como una hora en la que contemplamos al que veremos cara a cara para siempre en las alturas celestes. Ese que es nuestro Hermano quiere estar siempre con nosotros, Ése que es nuestro Maestro nos enseña la felicidad en sus brazos extendidos que esperan del hombre una carrera de amor hacia Él, Ése que es nuestra Vida, quiere que vivamos compartiendo su mesa aunque seamos imperfectos, sucios, pecadores porque está dispuesto a perdonarnos setenta veces siete y nos llama a su Casa para compartir el Pan de los Ángeles con nosotros..., ¡Dios se ofrece a sí mismo!. Entonces en esta octava, ante tan gran Misterio, ante tan gran obra de Amor no podemos sino llenarnos de lágrimas y contemplar, encendido el corazón a Quien es el Redentor de la humanidad. Y como queremos, movidos por el Espíritu Santo comunicar a otros nuestra amistad con Él, llevar el Evangelio a todas partes, contemplemos y demos a conocer lo contemplado con un espíritu iluminado por la Luz y dispuestos a obrar lo que el Camino y la Verdad nos enseña. Feliz Pascua para todos los lectores y bendiciones abundantes.